La manipulación emocional en los equipos de trabajo
No cabe duda que hay circunstancias que son artífices de víctimas. Desde un campo de batalla hasta la doméstica violencia de género son escenarios donde las víctimas son legítimas, auténticas, víctimas de "verdad".
Cuando hablamos de "victimización" hacemos referencia a una estrategia manipulativa donde alguien utiliza las emociones, sentimientos y afectos para influir sobre otras personas consiguiendo un resultado esperado y favorable.
Con frecuencia, podemos observar como estos recursos manipulativos son frecuentes en los niños y algunos son verdaderos estrategas al lograr sus metas mediante el uso de las emociones y sentimientos en su entorno.
En la edad adulta, algunas personas siguen aplicando estos modelos para relacionarse y seguir influyendo en los demás. A eso llamamos coloquialmente "hacerse la víctima". Este patrón de conducta hace mucho daño porque su comunicación no es franca, ni directa, mucho menos honesta. La persona victimizada alcanza sus metas desde la lástima, la pena o generando culpa a sus interlocutores. Una fórmula tóxica y perversa donde la comunicación sana y asertiva está ausente.
Los equipos de trabajo deben tener la capacidad de identificar y evitar esta manera de vincularse entre sí. De no hacerlo, se invertirán valiosas cargas de energía, tiempo y recursos en "desmarañar" las confusiones, conflictos y caos que abundan donde existan personas victimizadas.
En Agosto de 2022 tuvimos el gusto de participar en un proyecto coordinado por la ULL (Universidad de La Laguna) y el INIVIT (Instituto Nacional de investigación de Viandas Tropicales) en Cuba. Allí desarrollamos acciones de intercambio y cooperación internacional mediante formaciones y talleres en las organizaciones cooperativas agrícolas de Santo Domingo, Villa Clara.
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